En su primer comunicado, la Sociedad Iberista, asociación sin ánimo de lucro, inscrita el pasado 7 de junio de 2018, establece unas serie de directrices para marcar la base sobre la que desarrollar el iberismo.
Por todo ello;
El iberismo es un movimiento sociocultural
La Sociedad Iberista defenderá un iberismo social y cultural, como mejores herramientas para cohesionar los distintos territorios peninsulares.
Para facilitar esta tarea, se realizarán propuestas de fácil ejecución y se creará una base documental para facilitar la formación de los iberistas.
El Iberismo debe resignificarse
Nuestra asociación, en este comunicado, asume el reto que supone resignificar el significado del iberismo, especialmente en Portugal, donde el recelo supone un problema.
El Iberismo no puede considerarse como un movimiento exclusivamente de reunificación, aunque éste sea el proyecto final. Creemos que esta postura resta seriedad el movimiento y le es perjudicial.
En base a lo anterior, se dividirá el iberismo en dos fases, donde trataremos de eliminar las diversas asimetrías, con las cuáles, nunca podrá iniciarse un movimiento de integración peninsular.
El Iberismo es intrínsecamente europeísta
El iberismo es un movimiento europeísta en esencia. Cree en una Europa de geometrías variables, con las que Portugal y España puedan avanzar en proyectos de integración, con los mecanismos de la Unión, de forma más rápida y eficaz, que con la búsqueda de un consenso unánime entre los socios europeos.
Un recurso imprescindible para luego poder importar la experiencia adquirida al resto de Europa, a los países iberoamericanos o a los miembros de los PALOP.
El Iberismo es intrínsecamente europeísta
El iberismo debe ser un contrapeso contra los movimientos nacionalistas, constituyéndose en el andamio perfecto para una Unión Europea envuelta en una sucesión de crisis, desde que ésta fuese fundada.